Rápidas para juzgar

Hace ya tiempo, un matrimonio de amigos tuvieron una noche libre y la aprovecharon para ir a un bar. Él, que no acostumbra beber, quedó algo mareado; pero afortunadamente no hizo nada que lamentar.

El problema fue cuando, al día siguiente, su esposa se reunió con otro grupo de amigos y se le ocurrió mencionar que su marido no la había acompañado por estar un poquito crudo. Una de las amigas quien por cierto, no conocía a la pareja como nosotros, no lo pensó dos veces para afirmar:

- No sé como soportas a un hombre así, deberías ya de dejarlo.

En esta época, estamos en una curiosa dicotomía: La mujer, por fin se atreve a hacer valer sus derechos, y es capaz de hacer su vida sola si su relación de pareja no le satisface. Pero desafortunadamente, eso se ha significado también que su nivel de tolerancia ha disminuido tremendamente.

Si uno pierde el trabajo y pasa un mes sin que nada aparezca, nos convierte en un parásito que vive a expensas de ella. Un día que se nos pasen las copas ligeramente nos vuelve alcohólicos. Si en alguna ocasión estamos honestamente demasiado cansados para tener sexo, las estamos ignorando o peor, ya no las queremos.

Una de las claves para que una pareja funcione es la comunicación, y eso tiene que funcionar en ambos sentidos. La mujer debe de saber que, si algo no le gusta de su pareja, lo primero que tiene que hacer es decírselo.

Nada más desesperante para un hombre que escuchar un "nada" cuando uno le pregunta a su pareja que le pasa; aunque sea más que evidente que está molesta. A diferencia de lo que muchas mujeres piensan, los hombres no somos criaturas egoistas y egocéntricas, y somos capaces de cambiar nuestras actitudes si se nos lo hacen saber, pero ahí está el secreto, que lo sepamos.

Como todo, ésto es un equilibrio. Una mujer no puede pensar en terminar una relación ante el primer error del hombre, pero tampoco puede dejar que se repita la misma conducta una y otra vez... Siempre y cuando se le haya dicho anteriormente.
Comunicación y cooperación son la base, pues de otra forma, una relación simplemente no funcionará. Y esto es recíproco, nadie lee la mente de los demas.

fuente: Manifiesto antipataneril